El crecimiento descontrolado del gasto público exige un aumento de impuesto y más emisión monetaria. Los sectores más acomodados presionan para reducir el impuesto a las ganancias, cobrando un bono extraordinario que compense la inflación. La situación de los hogares más pobres es más grave porque sufren la aceleración de la inflación. Para reducir el crecimiento del gasto público.
Solo un 3% del aumento del gasto público se financia con aumento de recaudación del impuesto a las ganancias de las personas.
Los sectores mejor posicionados hacen huelgas contra el impuesto a las ganancias y presionan por un bono extraordinario que compense la inflación. Esto tiene un impacto social muy regresivo porque son los hogares más pobres los principales afectados por la paralización de los servicios debido a las huelgas y por la aceleración en el crecimiento de los precios.
De este proceso no se sale reduciendo el impuesto a las ganancias u otorgando un bono extraordinario sino eliminando la inflación. Para ello es imprescindible desacelerar el aumento del gasto público.
Melani Sara 1ºA Economía
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